viernes, 19 de junio de 2009

Piso, piso, gorgorito...

Por fin, ya tengo piso. Como las mejores cosas de la vida, di con él de casualidad. Harta de ver absurdos decorados de "habitación de estudiante", que bien podrían ser a veces de papel maché, busqué una vez más, sólo una, un piso más, sólo uno, y lo encontré. Sabia lección ésta que se puede aplicar en cualquier situación: cuando veas que no puedes dar un paso más y sientas verdadera necesidad de rendirte, da otro paso. En muchas ocasiones, el paso definitivo no es el último, es el siguiente.

Esta búsqueda de habitación ha sido, cuanto menos, interesante. Y me gustaría poner mi granito de arena, en lo que a ofrecer habitaciones decentes se refiere, criticando por aquí la subestimación del criterio del estudiante a la hora de compartir piso. Me recuerda a la ecuación tan inexacta que equipara a niños con tontos. No sé a quién se le habrá ocurrido esa idea, pero es de todo menos cierta. Lo mismo pasa con los estudiantes. Que aún no seamos adultos profesionales no nos hace adultos amateurs. Así que, por favor, queridos arrendadores, a la hora de poner un piso en alquiler, no tengáis tanto morro y adecentadlo. Una "casa" es algo más que cuatro paredes y un techo. Hombre, es que he estado en auténticos zulos de convento. He visto una habitación con una ventana diminuta que, además, daba al pasillo de la propia vivienda... A ver cómo saco el olor, por ejemplo, de freír pescado de la habitación. Es cómo intentar ventilar el olor a residuo industrial de un coche abriendo las ventanas en ese maldito tramo de carretera.

Por no hablar de las fotos que se ponen, o directamente no se ponen, en las páginas dedicadas a estos menesteres. He visto fotos borrosas hasta el punto de no saber si estaba viendo un cuarto de baño o el interior de una discoteca, y eso que lleva menos de un segundo sacar una foto y menos de 2 minutos pasarla al ordenador; he visto anuncios con fotos de todo el piso excepto de la habitación en alquiler; otros solamente incluían la foto del baño y la cocina, total, teniendo dónde comer y dónde depositar lo digerido, para qué queremos más, ¡que vivan los tamagotchis!; fotos de habitaciones hechas tal desastre (dice La Reina Del Desorden) que no se apreciaban bien las dimensiones de las mismas...

También he leído "octabo" y "hubicado" (diferentes anuncios), y la h dista bastante de la no-tecla, por no decir que dista todo lo posible, de modo que no hay adyacencia de teclas que valga para disculpar la erdinosauria.


No obstante, he de decir que hay gente que realmente se lo curra, no necesariamente con millones de fotos, pero sí todas ellas útiles (porque tampoco vale poner 10 fotos de las cuales 5 ó 6 son ensayo y error de la foto que realmente te dice algo... true story). Incluso algunos incluyen un plano de la casa, para que te ubiques, porque nos quitan la h y nuestro sentido de la orientación protagoniza una tragedia griega.

Así que, a todos los que os esforzáis en anunciar y alquilar la habitación:

¡¡GRACIAS!!



A los que tiráis piedras contra vuestro propio tejado, nunca mejor dicho: probad suerte en las elecciones municipales. Os reconoceremos por la rosa en la mano. Algún día llegaréis a las generales y desempeñaréis dos candidaturas consecutivas para mayor confusión de la población.


Venga, un beso.

1 comentario:

Keiboll dijo...

Menos escribir y más estudiar! jajaja
Jo, me alegro de que por fin hayas encontrado piso, porque supongo que se te habrá ido mucho tiempo en la búsqueda del santo grial..ermm...del piso xD
Me he reído bastante leyéndolo, no me imaginaba que fuera tan surrealista esto de buscar piso.
A todo esto, ¿te pilla cerca de la uni o está en la otra punta? Aunque yo preferiría lejos y decente que cerca y como los que has contado.
Me vuelvo al estudio,
Un saludo!