martes, 2 de diciembre de 2008

N de nieve y T de Navidad



Primer día de diciembre, primeros copos. En unos 10 minutos se cubrieron plantas y techo de coches, pero ya no queda nada. Tiempo al tiempo, nunca mejor aprovechadas las acepciones.

Por extensión, yo estoy mala. Si hasta hace poco me duchaba de noche porque por la mañana cuando me levanto no arrancó la calefacción aún, ahora me ducho de noche porque por la mañana puede que ni corra el agua por las tuberías del PUTO FRÍO QUE HACE. Resultado: gargantitis, como siempre. Así que hoy ya no fui a clase, a pesar de haber hecho el esfuerzo de madrugar y morirme de frío y desayunar, en ese orden.

Eso sí, el ordenador, la impresora y el microondas deberían funcionar mejor que nunca, por aquello de las máquinas y el frío. Es más, ayer a la impresora se le hacían los cartuchos tinta china. Se encendía y se apagaba sola. Es su primer invierno, pobre.

Y, por cierto, descubrí la manera de estudiar en Navidad sin sentirme aislada del espíritu de las fiestas: acompañar el proceso con Té de Navidad (fondo de la foto). Lleva: té negro, canela, almendra, vainilla, naranja, jengibre (gingerbread man!!!) y aromas naturales. 230gr me agencié ayer. Huele tan bien que apetece echarlo en un bol y dejarlo como uno de esos ambientadores. Hmmmm, a lo mejor se pueden hacer infusiones de esos ambientadores. Queda pendiente de probar.


Pues días de cuento con príncipe y principesa, un terrorífico monstruo magnético con su inimitable líder llamado Wyndorf*, y un atrevido Naked Man de How I Met Your Mother a modo de cagón de Belén televisivo.

Fin de semana que termina con los primeros copos :). Continuidad, lectores, continuidad. Predicando con el ejemplo de lo que carece este blog.


*Pronúnciese en plural.

1 comentario:

Pelayo dijo...

Ya se echaba en falta una actualización :)

Lo bueno es que no las ha habido porque poco tiempo nos ha quedado, entre conciertos, cenas en parkings, muffins de avellana y chocolate y bancos en cafeterías ¿eh?


Cuando vi al hombre aquel cargarte el (too small) paquete de té lo vi claro, trabajar echando paladas de cientos de variedades de te en bolsitas, precintarlas, pesarlas y cobrarlas, mientras sueltas alguna coña al cliente es sin duda uno de los trabajos más chulos que hay. Y se puede hacer con melena ! xD